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EL TIMO DEL TITULITO DE ENSEÑANZAS PROFESIONALES

DE MÚSICA (Y DANZA): 

O por qué el proyecto de ley de Enseñanzas Artísticas

no abre la puerta  al desarrollo de los profesionales

de la música (y la danza)

 

 

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La ley de enseñanzas artísticas responde a dos mandatos, el primero es armonizar las enseñanzas superiores a las universitarias pero el segundo mandato es armonizar las enseñanzas profesionales dentro del sistema educativo español y europeo y esta segunda parte es de vital importancia para los profesionales de la música presentes y futuros. Para los estudiantes y para los profesionales en activo.

 

               El Proyecto de Ley de Enseñanzas artísticas que se ha remitido al Congreso de los Diputados para que se vote en las próximas semanas recoge en su preámbulo la previsión de un título profesional de música de grado superior y figura en su artículo 62. 1 Las enseñanzas artísticas profesionales de música y de danza se organizarán en un grado superior de seis cursos de duración.

               Deberíamos felicitarnos porque es una necesidad que los profesionales de la música (y la danza) puedan acceder a ese nivel formativo para armonizar estas enseñanzas profesionalizantes en el sistema educativo español y europeo, por así decirlo es una pieza que falta en el sistema. Se trata de un paso absolutamente necesario para el desarrollo de los profesionales de la música y (de la danza).

 

Actualmente las enseñanzas profesionales de música (y de danza)  terminan con una titulación de grado medio (equivalente a FP1, técnico medio de artes plásticas y deporte, y bachillerato) después de 6 cursos académicos. Pero ese nivel académico impide al músico que termina su titulación profesional:

               – progresar en sus estudios profesionales hacia perfiles demandados por el sistema productivo que se enmarquen en ese nivel Meces1 de Técnico Superior en Música (que ya existe en otros países europeos)

               – acceder de manera directa a títulos de educación superior ya sea de técnicos superiores de FP, Universitarios (como si que sucede en estudiantes que tienen una titulación de Técnico Superior)

               – acceder a formación continua para el empleo

               – acreditar competencias profesionales adquiridas por la experiencia profesional.

 

En definitiva, realizar formaciones complementarias en otros ámbitos relacionados con la música o las artes y desarrollar una carrera profesional posterior porque no existen estas pasarelas formativas en el sistema. Los y las profesionales artísticos tienen los mismos derechos que el resto de trabajadores de recualificarse, que les reconozcan las competencias que tienen y el poder reorientar sus carreras profesionales con ayuda del sistema educativo. Es decir,  las enseñanzas profesionales actuales son una isla dentro del sistema educativo español y comunitario.

               Una titulación profesional de grado superior sí permite todo lo expuesto, al formar parte del primer nivel de la educación superior no universitaria (MECES 1, EQF 5), con una carga de créditos en su formación que pueden ser reconocidos para posteriores estudios superiores, accediendo a la educación universitaria. También permite acceder al mercado de trabajo mediante un título de técnico superior que se exige en muchos puestos de trabajo, de la administración y fuera de ella, y a los que no se puede acceder por los músicos profesionales que terminan actualmente sus estudios.

               Y también porque permite acceder a otras formaciones profesionales relacionadas con la música del mismo nivel y a su reconocimiento profesional, permitiendo un desarrollo del profesional de la música másallá de la interpretación. Desarrollar una auténtica carrera profesional dentro de la música no limitada a la interpretación es algo generalizado. Se trata de algo necesario que ha sido una reivindicación de los estudios profesionales de música desde hace décadas: integrar la educación musical de carácter profesional con el resto de los estudios profesionales, al igual que se ha hecho con la superior y la educación universitaria.

 

Pero esta Ley contiene una trampa: no se modifica el actual sistema de estudios existentes de seis años, sino que se le cambia el nombre y lo que ahora es grado medio se le llama título superior. Y eso, no resuelve nada porque se rompe el marco de edad del sistema educativo general.

Porque los estudios profesionales de música actuales se terminan a los 17-19 años. La edad de terminación de los títulos medios y del bachillerato. Y con esa edad, lo llamen título superior o no, no es posible a la educación superior ni en España ni en Europa, ni tampoco se puede acceder a estudios superiores ni a nada para lo que habilita un título profesional superior (meces1) al que se accede (no se termina) a esa edad.

 

               Y no creemos que se trate de algo involuntario, porque cuando se habla en la ley de acceso a estudios superiores (el art. 7), no aparece el título profesional superior de música y danza pero sí los títulos superiores de formación profesional, artes plásticas y deportes.

 

               Se trata del timo del titulito. Te voy a reconocer un titulito superior de música y te va a servir para lo que te sirve ahora; para nada. No vas a poder acceder a la educación superior, ni a una formación profesional superior (ya la tienes), ni a una formación trasversal y continua en otros aspectos de la profesión, ni a los puestos de trabajo, el pasaporte profesional europeo ni a nada de lo que tienen acceso los restantes títulos profesionales superiores.

 

Ya basta de tomarles el pelo a los estudiantes de música. En España estudian música unos 300.000 personas, 200.000 en la no reglada (entendemos que no sólo por ocio sino porque el sistema educativo no responde a las necesidades del sector productivo ya que según nuestras encuestas más del 65% de los músicos profesionales habían accedido al sector por vías no formales) y unas 100.000 en el sistema reglado de las que 90.000 lo hacen en las enseñanzas elementales y profesionales frente a las menos de 10.000 que lo hacen en las superiores. No dar respuesta al 90% de los estudiantes de enseñanzas regladas y a gran parte de los profesionales que van a acceder vía enseñanzas no regladas se nos antoja una temeridad legislativa.

               Casi el 50% de los estudiantes de música están realizando los estudios profesionales. Frente a menos del 10% de la educación superior. Con unos planes de estudio antiguos que los profesores suplen con su esfuerzo y su dedicación para adecuarlos a la realidad, porque la administración no lo hace. Sin contemplar formaciones específicas para el trabajo que se va a desarrollar ni preparación para la posterior vida profesional. Más de 46.000 estudiantes que superan 6 años de estudio para obtener una titulación sin salidas profesionales y a los que, ahora, se les quiere seguir negando una carrera profesional completa pero diciendo que van a tener un título superior.

 

Es hora de decir que ya está bien. No queremos que nos cambien el nombre a lo que ya existe. Queremos que se contemple un itinerario formativo al título profesional superior con las mismas salidas educativas y profesionales que el resto de títulos profesionales superiores. 

 

 

#leyenseñanzasartisticas #enseñanzasprofesionalesdemusica

 

 

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